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Un placebo parece ser suficiente para mejorar la vida sexual de muchas mujeres. Las damas con bajo deseo sexual que toman un placebo sienten una satisfacción considerablemente mayor a la hora de hacer el amor, concluyó un nuevo estudio.
"Nuestro estudio muestra que las expectativas de las mujeres para mejorar su sexualidad tienen un efecto sustancialmente positivo en el bienestar sexual, sin la necesidad de un tratamiento farmacológico real", dijo Cindy Meston, de la Universidad de Texas (Estados Unidos). Las conclusiones fueron publicadas en Journal of Sexual Medicine.
DESEO PARA AUMENTAR
Para llegar a dichas conclusiones, los autores trabajaron con 200 mujeres de 35 a 55 años durante tres meses. Cada una contestó un cuestionario para evaluar su nivel de disfunción sexual, que podía deberse al bajo deseo, la baja excitación o la dificultad para conseguir un orgasmo. Todas las damas hablaron con especialistas sobre sus problemas sexuales y se siguió de cerca su comportamiento y sensaciones sexuales durante toda la investigación.
Meston dividió a las participantes en dos grupos. Un conjunto recibió un placebo en vez de un tratamiento farmacológico destinado a mejorar el deseo y la excitación sexual. En promedio, una de cada tres mujeres que tomó el placebo experimentó mejoras marcadas en su vida sexual en el primer mes de la investigación.
Para medir esta mejora los autores contaron la frecuencia en la cual las voluntarias se sintieron satisfechas con sus encuentros sexuales. Por ejemplo, algunas participantes aseguraron sentir una mayor estimulación al momento de hacer el amor pero sus compañeros no habían recibido ninguna indicación especial.
Querer sentirse mejor y tratar de encontrar una solución a los problemas sexuales mediante la participación en un estudio hace que las parejas se sientan más unidas, se comuniquen mejor e incluso que actúen de manera diferente entre sí durante los encuentros sexuales, dijo Meston
"Nuestro estudio muestra que las expectativas de las mujeres para mejorar su sexualidad tienen un efecto sustancialmente positivo en el bienestar sexual, sin la necesidad de un tratamiento farmacológico real", dijo Cindy Meston, de la Universidad de Texas (Estados Unidos). Las conclusiones fueron publicadas en Journal of Sexual Medicine.
DESEO PARA AUMENTAR
Para llegar a dichas conclusiones, los autores trabajaron con 200 mujeres de 35 a 55 años durante tres meses. Cada una contestó un cuestionario para evaluar su nivel de disfunción sexual, que podía deberse al bajo deseo, la baja excitación o la dificultad para conseguir un orgasmo. Todas las damas hablaron con especialistas sobre sus problemas sexuales y se siguió de cerca su comportamiento y sensaciones sexuales durante toda la investigación.
Meston dividió a las participantes en dos grupos. Un conjunto recibió un placebo en vez de un tratamiento farmacológico destinado a mejorar el deseo y la excitación sexual. En promedio, una de cada tres mujeres que tomó el placebo experimentó mejoras marcadas en su vida sexual en el primer mes de la investigación.
Para medir esta mejora los autores contaron la frecuencia en la cual las voluntarias se sintieron satisfechas con sus encuentros sexuales. Por ejemplo, algunas participantes aseguraron sentir una mayor estimulación al momento de hacer el amor pero sus compañeros no habían recibido ninguna indicación especial.
Querer sentirse mejor y tratar de encontrar una solución a los problemas sexuales mediante la participación en un estudio hace que las parejas se sientan más unidas, se comuniquen mejor e incluso que actúen de manera diferente entre sí durante los encuentros sexuales, dijo Meston
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