NUTRICION.PRO
Claves de una dieta para adelgazar. Si estás decidida a comenzar una dieta, debes e tener en cuenta tu estado de salud, hábitos y costumbres; debe de contener gran variedad de alimentos y no debe producir desequilibrios nutricionales.
Realiza comidas de manera ordenada. Cada 3-4 horas debes comer una comida principal -desayuno, comida o cena-, así como tentempiés a media mañana o en la merienda.
Hidrátate con agua. Modera el consumo de bebidas con alcohol, azucaradas y carbonatadas, que tienen más calorías y modera el consumo de bebidas light.
Utiliza formas de cocinar variadas y con poca grasa. Técnicas como el horno, el papillote, a la brasa, el vapor o guisos con menos aceite, son ideales en este tipo de regímenes. Utiliza poca sal y sustituye por especias para aportar sabor.
Incluye frutas y verduras en tu dieta, cada día; puede ser el postre de las comidas principales o servir de tentempié entre horas. La verdura debe estar presente en comida y cena, de primer plato o de acompañamiento, unaen formacruda como las ensaladas y otra cocina y/oen formade puré, menestras, etc. Las frutas y las verduras aportan fibras, vitaminas, pocas calorías y beneficiosos nutrientes para la salud.
Es importante que reduzcas la grasa de tu dieta. Reduce los alimentos más grasos, en especial los de origen animal, porque aportan más grasas saturadas. Opta por las carnes sin grasa, prefiriendo antes el pescado blanco y azul. Evita el consumo de quesos curados, bollería industrial y dulces.
Realiza ejercicio. Busca actividades que te gusten, como paseaos, senderismo, bicicleta. No cojas ascensores, sube andando y siempre con una actitud positiva, pensando que con ella vas a lograrlo.
Realiza comidas de manera ordenada. Cada 3-4 horas debes comer una comida principal -desayuno, comida o cena-, así como tentempiés a media mañana o en la merienda.
Hidrátate con agua. Modera el consumo de bebidas con alcohol, azucaradas y carbonatadas, que tienen más calorías y modera el consumo de bebidas light.
Utiliza formas de cocinar variadas y con poca grasa. Técnicas como el horno, el papillote, a la brasa, el vapor o guisos con menos aceite, son ideales en este tipo de regímenes. Utiliza poca sal y sustituye por especias para aportar sabor.
Incluye frutas y verduras en tu dieta, cada día; puede ser el postre de las comidas principales o servir de tentempié entre horas. La verdura debe estar presente en comida y cena, de primer plato o de acompañamiento, unaen formacruda como las ensaladas y otra cocina y/oen formade puré, menestras, etc. Las frutas y las verduras aportan fibras, vitaminas, pocas calorías y beneficiosos nutrientes para la salud.
Es importante que reduzcas la grasa de tu dieta. Reduce los alimentos más grasos, en especial los de origen animal, porque aportan más grasas saturadas. Opta por las carnes sin grasa, prefiriendo antes el pescado blanco y azul. Evita el consumo de quesos curados, bollería industrial y dulces.
Realiza ejercicio. Busca actividades que te gusten, como paseaos, senderismo, bicicleta. No cojas ascensores, sube andando y siempre con una actitud positiva, pensando que con ella vas a lograrlo.
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