La dieta debe ser variada y equilibrada, normoglucémica y adecuada en calorías, adaptándose a características de cada individuo, considerando su estilo de vida y su medicación, pudiendo o no, dependiendo de su peso, ser hipocalórica
Es importante que la alimentación sea baja en grasas saturadas y colesterol, eliminando fuentes de carbohidratos de asimilación rápida -azúcar, miel, confituras, bebidas azucaradas o zumos y dulces en general-, controlando las fuentes de carbohidratos complejos -cereales integrales, patatas y legumbres-, rica en fibra y en nutrientes esenciales.
El aporte de fibra será principal y se combinarán alimentos ricos en fibra con las fuentes de hidratos de carbono, para reducir su índice glucémico, como por ejemplo combinar patatas con judías verdes.
Es primordial fraccionar la comida diaria en 5 ó 6 tomas diarias, para tener mayor control de la glucemia. Establecer un aporte y distribución de los glúcidos diario exacto, especialmente en los individuos que se tratan con insulina, para evitar crisis hipoglucémicas; es decir que se tomen cantidades marcadas y similares en las mismas tomas cada día.
Debes de adaptar la dieta a las tomas de antidiabéticos orales, a la insulina y a la realización de cualquier actividad física importante. La repartición de la energía para los principios inmediatos será la siguiente: 50-55% de las calorías en hidratos de carbono, 15% en proteínas y 30-35% de grasas, evitando exceso de grasas saturadas.
Es importante que la alimentación sea baja en grasas saturadas y colesterol, eliminando fuentes de carbohidratos de asimilación rápida -azúcar, miel, confituras, bebidas azucaradas o zumos y dulces en general-, controlando las fuentes de carbohidratos complejos -cereales integrales, patatas y legumbres-, rica en fibra y en nutrientes esenciales.
El aporte de fibra será principal y se combinarán alimentos ricos en fibra con las fuentes de hidratos de carbono, para reducir su índice glucémico, como por ejemplo combinar patatas con judías verdes.
Es primordial fraccionar la comida diaria en 5 ó 6 tomas diarias, para tener mayor control de la glucemia. Establecer un aporte y distribución de los glúcidos diario exacto, especialmente en los individuos que se tratan con insulina, para evitar crisis hipoglucémicas; es decir que se tomen cantidades marcadas y similares en las mismas tomas cada día.
Debes de adaptar la dieta a las tomas de antidiabéticos orales, a la insulina y a la realización de cualquier actividad física importante. La repartición de la energía para los principios inmediatos será la siguiente: 50-55% de las calorías en hidratos de carbono, 15% en proteínas y 30-35% de grasas, evitando exceso de grasas saturadas.
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