¡Relájate, elimina el acné por estrés!

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¿Estresado? ¡Cuidado! Aunque no seas un adolescente, el acné por estrés puede provocar erupciones en la piel si estás sometido a una presión muy fuerte.


Hemos escuchado muchos mitos sobre el acné como: si comes mucho chocolate te saldrán barritos, que no los exprimas porque aparecerán más y que sólo salen el la adolescencia, entre otros. Sin embargo, muchos no hemos entendido por qué está ahí. Solamente nos parecen molestos y antiestéticos.

El acne es básicamente cuando un poro se obstruye por grasa, esto sucede porque, los poros tienen en el fondo una glándula sebácea que actúa como un lubricante ya sea de piel cabello o de ambas. Ésta actúa de forma regular en la niñez, pero entrada la pubertad, por los cambios hormonales, ordena que la producción de sebo aumente, lo cual en ocasiones puede ser descontrolada.

Es por eso que normalmente los casos de acné los vemos en la adolescencia, una vez que las glándulas sebáceas producen mucho sebo, con lo que se puede llegar a tapar el poro.

Ahora, no todos los brotes de acné son del mismo tipo, por ejemplo: las famosas espinillas son acumulaciones de sebo en el poro, aunque éste permanece abierto, claro que con las moléculas de mugre que se adhieren a nuestra cara, ese sebo toma un tono oscuro y es ahí cuando se forma la espinilla.

Otro brote de acné es la obstrucción de los poros, pero se tapan con una capa delgada de piel y se puede ver un punto blanco en la punta de esa protuberancia rojiza.

Y por último, tenemos esos granos rojizos que duelen, esto es por que las paredes del poro se abren y crea una pequeña infección gracias a que se cuelan algunas bacterias. Las células muertas de la piel y el sebo quedan atrapados por una capa de piel.

Acné por estrés

Es aquel que sale cuando algo nos preocupa, y es muy simple su explicación: cuando nos encontramos en una situación de estrés o nerviosismo nuestras glándulas sudoríparas y sebáceas comienzan a producir hasta mil veces más sudor o sebo respectivamente.

Ello provoca que nuestros poros se obstruyan con más facilidad, claro que esto también se relaciona directamente con la genética y las hormonas. Si en nuestro ADN hay una piel grasa, seremos más propensos a esta afección, pero si por el contrario, es de cutis seco, prácticamente no batallaremos con el problema.

Es importante saber que en nuestra cara hay muchas terminaciones nerviosas, y que cuando éstas están bajo estrés, estimulan de más las glándulas sebáceas.

Se contraen para expulsar su contenido, comenzamos con una piel más graso, si esto sucede por largos periodos, nuestros poros no van a aguantar tanta secreción y se van a tapar. Claro que el problema se vuelve más serio cuando agregamos el estrés por la apariencia de nuestra piel.

Para deshacernos del acné causado por estrés es relajarnos un poco. Los productos que venden de poco servirán porque no atacan a la causa directa.


Acude a un dermatólogo para que sea él quien te oriente. Seguramente te dará una muy buena opción para solucionar el problema y así lucir un cutis sin esos molestos granitos.