Dieta para prevenir el cáncer. Es importante una alimentación ecológica, una dieta vegetariana y semivegetariana, que pueden ser muy útiles en la prevención y el tratamiento del cáncer.
Es importante realizar una dieta cruda durante dos semanas, dos veces al año, en primavera y verano, como medida preventiva. En el caso de que el cáncer ya existe, es importante llevar una dieta rica en alimentos crudos y resulta un buen apoyo en el tratamiento y la recuperación de la enfermedad.
Hay que evitar el sobrepeso o bien, en caso de que lo haya, realizar una dieta de adelgazamiento equilibrada, debe de ser una dieta alcalinizante y desde un nivel preventivo se deben de tomar muy moderadamente.
En el caso del tratamiento se procederá a excluir alimentos, como proteínas animales, todos los alimentos que contienen grasas saturadas, alimentos refinados, azúcar, sal y los fritos y para sustituir a las proteínas animales, se recomendará la ingesta de alimentos vegetales ricos en proteínas: tofu, tempeh, seitán, legumbres + cereales, entre otros.
La dieta debe ser muy rica en frutas y verduras y se recomienda el consumo diario de zumos; la presencia de fibra en la dieta resulta imprescindible y se prescindirá de los alimentos ahumados, por la presencia de benzopireno o salazones
Es importante realizar una dieta cruda durante dos semanas, dos veces al año, en primavera y verano, como medida preventiva. En el caso de que el cáncer ya existe, es importante llevar una dieta rica en alimentos crudos y resulta un buen apoyo en el tratamiento y la recuperación de la enfermedad.
Hay que evitar el sobrepeso o bien, en caso de que lo haya, realizar una dieta de adelgazamiento equilibrada, debe de ser una dieta alcalinizante y desde un nivel preventivo se deben de tomar muy moderadamente.
En el caso del tratamiento se procederá a excluir alimentos, como proteínas animales, todos los alimentos que contienen grasas saturadas, alimentos refinados, azúcar, sal y los fritos y para sustituir a las proteínas animales, se recomendará la ingesta de alimentos vegetales ricos en proteínas: tofu, tempeh, seitán, legumbres + cereales, entre otros.
La dieta debe ser muy rica en frutas y verduras y se recomienda el consumo diario de zumos; la presencia de fibra en la dieta resulta imprescindible y se prescindirá de los alimentos ahumados, por la presencia de benzopireno o salazones
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